identidad

Creo que antes de empezar a hablar de nada debería presentarme, aun cuando estoy un poco confundida respecto a mi identidad, anteriormente llamaban Penélope, por aquello del telar que tejía en el día y deshacía en las noches, aun sabiendo que lo único que realmente me interesaba era terminarlo. Sin embargo siempre había una razón pasa deshacer que por motivos ajenos a mi he decidido olvidar.

Cuando olvidaron que ese era mi nombre la gente a mi alrededor comenzó a llamarme Fermina, Rosetta, Carrie o Holly. Pero a decir verdad gracias a una serie de eventos que no hubiera podido pronosticar hace un año, por poner algún número, he olvidado mi nombre real.

Ahora sigo tejiendo de día, recuerdos de distintos colores. Solo que ya no destejo de noche, me he dedicado a construir en vez de ha planear. Ya no escribo cartas porque he decidido vivir pasiones, Ya no hablo con Leonce, pues sufrimos una impresionante incompatibilidad de caracteres, y en definitiva no vivo la vida a través de mis amigas. Sigo sin embargo pensando que Tiffanys es la mejor opción para pasar un día rojo, de esos que de vez en cuando existen. Por que esos siguen. Aunque hace tiempo que no tengo una urgente necesidad de ir.

Lo triste de la situación es que he olvidado mi nombre real, o más bien me siento confundida por todos los demás, se muy bien que no soy ni Lolita ni Julieta. Pero no estoy segura respecto a nada más.

Y a pesar de todo mi falta de identidad no es hoy un problema. Por que me he dedicado a comprar sueños ajenos para poder así hacerlos míos. A alimentarme de besos y a dibujar sonrisas.

No tengo nombre pero no creo necesitarlo. Porque estoy contenta, y eso es todo.


Más frágil, claro está, pero de eso hablamos otro día.

Lucia.

P.S: